viernes, 29 de marzo de 2013

17 febrero 2013

No tenemos un lenguaje para los finales... 

No tenemos un lenguaje para los finales,
para la caída del amor,
para los concentrados laberintos de la agonía,
para el amordazado escándalo
de los hundimientos irrevocables.
¿Cómo decirle a quien nos abandona
o a quien abandonamos
que agregar otra ausencia a la ausencia
es ahogar todos los nombres
y levantar un muro
alrededor de cada imagen.
¿Cómo hacer señas a quien muere,
cuando todos los gestos se han secado,
las distancias se confunden en un caos imprevisto,
las proximidades se derrumban como pájaros enfermos
y el tallo del dolor
se quiebra como lanzadera
de un telar descompuesto.
¿O cómo hablarse cada uno a sí mismo
cuando nada, cuando nadie ya habla,
cuando las estrellas y los rostros son secreciones neutras
de un mundo que ha perdido
su memoria de un mundo.
Quizá un lenguaje para los finales
exija la total abolición de los otros lenguajes,
la imperturbable síntesis
de las tierras arrasadas.
O tal vez crear un habla de intersticios,
que reúna los mínimos espacios
entreverados entre el silencio y la palabra
y las ignotas partículas sin codicia.
Roberto Juarroz 

2013

La palabra es el único pájaro 
que puede ser igual a su ausencia.
R.Juarroz 

2013

Cada uno tiene
su pedazo de tiempo
y su pedazo de espacio,
su fragmento de vida
y su fragmento de muerte
R.Juarroz 

2013







Respiro el verano 
con su olor a río 
y corre por la noche
mi diminuto fantasma
silencioso ......


2013











buscando rostros
formando rostros
desgarraduras en 
la vieja pared 

  

2013











Me borraron 
Me escriben en el muro
el viento y la mirada
........

2013


2013










Se fuga 
Y la mujer se vuelve

 a 
escalar el viento 
a

vivir la muerte 

2013

Ese instante congelado de nada
acurrucado en la cueva del recuerdo
sin manos para decir dolor
sin manos para regalar flores...

2013


¿Las sombras devuelven el paisaje rechazado por los relojes?